Algunos resultados de estudios científicos revelan que el tamaño promedio de un pene erecto, oscila entre 13 y 15 centímetros de largo. Sin embargo, el tamaño del pene es sólo un aspecto relativo, pues el que pudiera ser “perfecto” para una mujer, podría resultar pequeño o muy grande para otra.
Al igual que el órgano sexual masculino varía en forma y tamaño, las vaginas también son diferentes. Por lo tanto, puede ser que el tamaño que resulte incómodo para una mujer con una vagina pequeña, sea adecuado para otra, cuyo órgano posee dimensiones mayores o una forma diferente. Sin embargo, estas diferencias físicas no deben ser un impedimento para el logro de la satisfacción sexual entre dos personas que se aman.
Aún cuando me dices que él es una persona experimentada en el sexo, es la primera vez que ustedes dos tienen un encuentro sexual y todo no tiene porque ir a pedir de boca. Si ya tuvieron esa experiencia, es posible que en posteriores ocasiones sea necesario dedicar un tiempo extra a la preparación o el jugueteo amoroso. De esa forma, la vagina tendrá mejores posibilidades de lubricarse y prepararse para la penetración.
Una de las claves para aceptar un pene de grandes dimensiones es estar preparada mentalmente. Si te contraes por miedo a que te haga daño, u ofreces algún tipo de resistencia, la penetración no podrá ocurrir fácilmente.
Algo muy importante es que converses con él y le expliques cómo te sientes y cómo él podría ayudarte. Si el sentimiento y el interés es mutuo, y si los dos están conscientes de lo que ocurre, pueden trabajar por mejorarla y superar cualquier otro inconveniente que pudiera aparecer en el camino, y recuerda relajarte.